10 oct 2009

DEJAR IR, OLVIDAR


"Cuando Gautama el Buda, decidió rendirse ante su búsqueda de la iluminación, fue precisamente cuando la encontró".....

Algunas veces el "rendirse" ante la búsqueda de determinada cosa o labor es motivo suficiente para lograr el objetivo buscado por tanto tiempo.

Esto sucede cuando por ejemplo una mujer ansía con todo su ser tener un bebé, y cada mes se decepciona al ver que su periodo llega; luego como tortura medieval convierte el sexo en obligación y a su marido en el esclavo permanente de sus deseos frustrados. Y no es sino hasta que ella por fin decide darse por vencida y adoptar un niño, o simplemente decide no tener familia, cuando, eso que estaba evitando que pudiera embarazarse, parece desaparecer mágicamente y por sorpresa, después de una noche de sexo con amor real y sin obligación, el resultado de la prueba de embarazo es positiva!!.

No pasa solo con este caso, pero es un ejemplo claro de lo que sucede cuando uno le da demasiada importancia a algo; se genera tanto estrés dentro de uno, que algunas veces el mismo entorno parece reaccionar a nuestras emociones y "evita" que sucedan las cosas como nosotros hemos estado esperando. Como si nos estuviera diciendo "YA CALMATE, POR QUE SI TE LO DOY AHORA NO PODRAS DISFRUTARLO!".

En la religión se maneja -"DEJASELO A DIOS"-, en la poesía popular -" DEJALO IR, SI ES TUYO REGRESA"- el punto es, RELAJARTE, el tomarse un descanso y dejar que las cosas sigan su curso es lo mejor, simplemente OLVIDAR.

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